El fin de semana pasado, días 28 y 29 se tuvo la primera convivencia Semillas del Reino, con un grupo de diez adolescentes llevado por catequistas, una madre y el párroco. El lugar fue en un precioso paraje de pinares en las Mogarizas (Chiclana). La dinámica "En busca del Tesoro" ha sido una verdadera aventura de descubrimiento atravesando las diversas pruebas de valores de la fe cristiana en continuos juegos que hacían muy divertida la interiorización de los valores cristianos. La experiencia ha sido enriquecedora, los niños han disfrutado muchísimo, ha sido una preciosa experiencia de encuentro con Jesús. Lo que más les ha impactado ha sido La Discoteca con el Señor, en la noche, después de la cena estuvimos con el Santísimo; en una profunda intimidad en la que los niños le decían a Jesús lo que más les gustaba de Él, y luego Jesús les hablaba personalmente a cada uno. Verdaderamente el Espíritu fue derramado en los corazones, fue una noche mágica. domingo, 30 de junio de 2013
Convivencia. La semilla del Reino
El fin de semana pasado, días 28 y 29 se tuvo la primera convivencia Semillas del Reino, con un grupo de diez adolescentes llevado por catequistas, una madre y el párroco. El lugar fue en un precioso paraje de pinares en las Mogarizas (Chiclana). La dinámica "En busca del Tesoro" ha sido una verdadera aventura de descubrimiento atravesando las diversas pruebas de valores de la fe cristiana en continuos juegos que hacían muy divertida la interiorización de los valores cristianos. La experiencia ha sido enriquecedora, los niños han disfrutado muchísimo, ha sido una preciosa experiencia de encuentro con Jesús. Lo que más les ha impactado ha sido La Discoteca con el Señor, en la noche, después de la cena estuvimos con el Santísimo; en una profunda intimidad en la que los niños le decían a Jesús lo que más les gustaba de Él, y luego Jesús les hablaba personalmente a cada uno. Verdaderamente el Espíritu fue derramado en los corazones, fue una noche mágica. 
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Hace unos meses Dios puso en mi sueños la idea de que los adolescentes (entre 10 a 14 años) de Campamento convivieran junto con otros adolescentes en su camino hacia la Confirmación, vivieran un fin de semana juntos para ahondar más su fé y para que se crearan mayores lazos de unión.
ResponderEliminarDía a día, Dios ha ido haciendo todo esto posible, convirtiéndose en un proyecto, en una ilusión y finalmente en una realidad.
El Espíritu me ha ido moviendo para que ir encontrando cada una de las actividades y los materiales que necesitábamos. Era una sorpresa ver como Dios le daba forma.
Ha sido nuestra fé en El, la que nos ha permitido que este fin de semana : Belén, Irene, Estrella, Alejandra, Pilar, Julia, Joselis, Aitana, Marta y Sonia vivieran junto con nosotros sus monitoras: Alejandra, Lucía, Loli e Inma y el sacerdote Lázaro una experiencia de Dios única.
Por la mañana nos embarcamos en el barco de la Fe hacia Jesús, en busca de su tesoro más preciado, el que todos tenemos en nuestro corazón. Por el camino, nos dimos cuenta de todo lo negativo que hay que deshacerse para que el barco vaya ligero y para recibir su luz con el sacramento de la reconciliación. En la noche se hizo la luz, cuando Jesús se expuso ante nosotros. Nosotros le hablamos y El nos habló. Al día siguiente pudimos disfrutar de la mesa con El en la Eucaristía donde nos acompañaron algunos padres. No han faltado los juegos y las risas, las confidencias,...
Finalmente todos los celebramos con una comida en comunidad y un paseo por las salinas de Carboneros.
Ojalá que esta convivencia de fin de semana nos una y nos ayude a que estas semillitas den su fruto en nuestra parroquia.
Le doy gracias a Dios por todo lo que hemos vivido y como me dijo una chica en la notita que me entregó en el momento de la paz: "Gracias por hacer realidad el proyecto de Dios". Gracias le doy a Dios por hacerme un instrumento para que su Reino se haga presente en la tierra.