Del
8 al 10 de noviembre tuvo lugar en la Casa de Espiritualidad de Santa
María de las Mogarizas en Chiclana un Retiro Espiritual impartido
por el sacerdote Lázaro Albar y la Fraternidad Velad y Orad con el
título Estar con Jesús, para más amarle y seguirle.
Desde el
principio hasta el final la presencia del Santísimo ungía el lugar,
es un amor y una paz que quiere alcanzar los corazones. Meditaciones
y contemplaciones acompañadas del silencio nos han servido para
experimentar el amor inmenso que Jesús nos tiene, avivar nuestro
amor a él, para que fortalecidos en su amor pisemos sus huellas como
seguidores y discípulos que queremos anunciarle mostrando su rostro
de amor misericordioso.
Las meditaciones: una llamada a estar con él,
estar con él fundamentalmente en la oración, alcanzar el
conocimiento interno del Señor, ser contemplativos en la oración y
en la acción, amar a Jesucristo, y las contemplaciones: estar con
Jesús para abandonarse en Dios, el icono Cristo Salvador fuente de
Vida, Jesús curó al leproso, Jesús se estremece de amor ante la
mujer adúltera, entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo,
junto con momentos de oración comunitaria, destacando: la paz de Dios
llega a los corazones que le acogen y la Eucaristía del domingo, han supuesto una fuerte experiencia de encuentro con Cristo, con el Padre y
el Espíritu Santo y María.
Es impresionante cómo Dios toca los
corazones cuando le dedicamos tiempo a Él. Adultos y jóvenes nos
hemos sentido abrazados en el amor de Dios, revitalizados en la fe,
fortalecidos en la esperanza e impulsados a vivir con más amor y
entrega para hacer presente el Reino de Dios aquí en la tierra allí
donde nos encontremos. ¡Demos gracias a Dios por su Espíritu que es
derramado en nuestros corazones! Bienaventurados los que se sienten
tocados, ungidos e impulsados a la misión.
Lázaro
Albar.
Con motivo de las celebraciones de la próxima semana ha sido necesario modificar el horario de las misas. Este es el horario para esos días.
El párroco Lázaro Albar continuará el trabajo de orientación de la realización de los iconos explicando su espiritualidad y técnica pictórica y haciendo las oportunas correcciones los miércoles de 5.30 a 8.30 h. El icono es una ventana abierta a las realidades del Reino de Dios donde Cristo, la Virgen, los apóstoles y los santos nos miran con un amor que deja transfigurado el corazón hasta hacer presente en nuestra vida la presencia de lo divino. 
El fin de semana pasado, días 28 y 29 se tuvo la primera convivencia Semillas del Reino, con un grupo de diez adolescentes llevado por catequistas, una madre y el párroco. El lugar fue en un precioso paraje de pinares en las Mogarizas (Chiclana). La dinámica "En busca del Tesoro" ha sido una verdadera aventura de descubrimiento atravesando las diversas pruebas de valores de la fe cristiana en continuos juegos que hacían muy divertida la interiorización de los valores cristianos. La experiencia ha sido enriquecedora, los niños han disfrutado muchísimo, ha sido una preciosa experiencia de encuentro con Jesús. Lo que más les ha impactado ha sido La Discoteca con el Señor, en la noche, después de la cena estuvimos con el Santísimo; en una profunda intimidad en la que los niños le decían a Jesús lo que más les gustaba de Él, y luego Jesús les hablaba personalmente a cada uno. Verdaderamente el Espíritu fue derramado en los corazones, fue una noche mágica. 
La
actividad diaria ha sido sencilla en su estructura, pero rigurosa y
exigente en el trabajo, siempre en un clima de total silencio. Cada
día, después del desayuno hemos comenzado la jornada con una charla
sobre cada una de las moradas, lo que nos ha ayudado a enmarcar el
trabajo diario. El resto del día cada asistente lo ha distribuido
libremente entre acompañar al Santísimo, que ha estado expuesto
todo el tiempo, o pasear por los bellos parajes de esta casa de
espiritualidad reflexionando sobre los textos de santa Teresa y una
selección de textos bíblicos seleccionados. Sólo hemos
interrumpido nuestra meditación para realizar la liturgia de las
horas. El día lo hemos terminado con la celebración de la
Eucaristía y después de la cena hemos dedicado un espacio para
compartir lo vivido durante el día. 
